Mantén estos cuatro objetos lejos del router de WiFi: el internet llegará a todos los rincones del hogar

Contar con una buena conexión permite una mejor experiencia al trabajar en línea o al disfrutar de películas a través de aplicaciones streaming

La conectividad WiFi está presente en la mayoría de hogares, pero hay factores que pueden obstaculizar la señal del router, limitando su alcance y efectividad. Entre estos factores, ciertos objetos y electrodomésticos del hogar pueden interferir con la red WiFi, provocando una experiencia frustrante de conexión.

La señal inalámbrica, aunque invisible, puede ser interrumpida por ondas electromagnéticas, estructuras metálicas, y otros tipos de obstáculos físicos, reduciendo su calidad y su alcance.

Comprender cómo ciertos elementos dentro de casa interfieren con la señal WiFi es clave para optimizar su rendimiento. Mantener los siguientes objetos alejados del router no solo mejorará la conexión a internet, sino que asegurará que esta llegue sin problemas a todos los rincones del hogar.

Pese a que no se usa de forma común su impacto es alto. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los microondas son uno de los aparatos más comunes que pueden causar interferencia en las redes WiFi. Esto es producto a que estos electrodomésticos operan en la misma frecuencia que los routers WiFi, generalmente alrededor de los 2.4 GHz.

Cuando una microondas está en funcionamiento, emite ondas de radio que pueden interferir directamente con la señal del router, provocando interrupciones en la conexión.

Para mitigar este problema, es crucial ubicar el router lejos de la cocina, o bien utilizar bandas de frecuencia diferentes, como la de 5 GHz, que son menos susceptibles a este tipo de interferencia.

Hay que asegurarse de que el router esté colocado en un lugar central y alejado de dispositivos electrodomésticos como el microondas para mejorar considerablemente la calidad y el alcance de la señal de internet en el hogar.

Pueden obstaculizar las señales de la red y evitar que se expandan en las habitaciones. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Puede parecer sorprendente, pero los espejos pueden afectar el rendimiento de una red WiFi. Los espejos funcionan como barreras reflectoras que pueden bloquear parcialmente la señal WiFi.

Este fenómeno ocurre porque los espejos contienen una fina capa de metal que refleja la señal, impidiendo que se propague adecuadamente por toda la casa.

Idealmente, el router debe colocarse en un lugar donde no haya espejos cerca. Si el router se encuentra cerca de un espejo, es posible que ciertas áreas del hogar experimenten zonas muertas o baja velocidad de conexión.

Reubicar el router en un espacio despejado y bien central para permitir una mejor dispersión de la señal puede contribuir significativamente a mejorar la conectividad en toda la vivienda.

Es clave identificar aquellos elementos que influyen en el servicio. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los teléfonos inalámbricos son otra fuente común de interferencia para las redes WiFi. Al igual que los microondas, funcionan en la banda de 2.4 GHz, lo que puede interferir con el router WiFi y afectar negativamente la conexión a internet.

Al recibir llamadas o mensajes, estos aparatos pueden generar pequeñas interrupciones en la señal WiFi cercana. Para minimizar el impacto de los teléfonos inalámbricos, se debe optar por teléfonos que operen en bandas distintas, como la de 5.8 GHz, que no interferirán con el router.

Además, mantener una cierta distancia entre el router y las bases de los teléfonos inalámbricos puede ayudar a reducir las interferencias. Para aquellas casas con varios dispositivos conectados, simplificar la red puede ofrecer más consistencia y velocidad.

Es un fenómeno común en los lugares amplios. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Las paredes gruesas, sobre todo aquellas hechas de materiales como concreto, ladrillo o metal, son conocidas por bloquear o debilitar las señales WiFi.

La estructura física de la casa desempeña un papel crucial en la dispersión de las ondas inalámbricas del router, siendo las paredes densas un obstáculo principal que debe considerarse en la planificación del posicionamiento del router.

Para contrarrestar este problema, es crucial colocar el router en un lugar céntrico y abierto, preferiblemente elevado para maximizar la cobertura.

Utilizar repetidores de señal WiFi o routers adicionales en grandes hogares puede ser necesario para asegurar una distribución uniforme de la señal a través de diferentes habitaciones y niveles, garantizando así que todos los dispositivos reciben una conexión estable y rápida.