INCREIBLE || La reacción de la China Suárez a las críticas de sus haters

Este lunes, la China Suárez subió una foto a su cuenta de Instagram disfrutando del nuevo año en Punta del Este junto a su madre, Marcela Riveiro. Sin embargo, allí recibió decenas de críticas, por lo que publicó un gran descargo.

«Pero qué manera de romper los huevos con la edad. Y todas mujeres», comenzó el mensaje de la artista.

A su vez, se refirió a las agresiones que comentan los usuarios de Instagram acerca de las prendas de ropa que usa. «Me visto como quiero, muestro el culo, a veces uso moños, a veces trenzas. Un día me pinta vestirme cómoda y deportiva, al día siguiente elegante», continuó la cantante.

Además, otro asunto que le molestó a la China Suárez fue las críticas que recibe sobre su edad y que debe mostrarse diferente por sus hijos. «No me etiqueto ni encasillo yo, menos lo van a hacer Uds. Metanse los mandatos que les hicieron creer donde más feliz los haga. Feliz año», finalizó.

Asimismo, en sus historias de Instagram también compartió un mensaje: «31 muy bien vividos. Y esto recién empieza. Así que vayan acostumbrándose o rajen de mis redes», compartió la artista.

Las críticas hacia la China Suárez

La China Suárez subió este mensaje debido a que sus haters le llenaron su publicación de mensajes acerca de que tiene 31 años y que tiene hijos, por lo que no puede lucir la ropa que quiera.

«Sinceramente, ¿no te da un poco de cosa que el día de mañana tus hijos vean tu historia? Osea, dejás a uno y a los 2 días estas con otro?», «También, si se come criaturas, claro que va a querer ser más joven«, «Que ridícula«, fueron algunos de las agresiones que recibió la actriz.

En el posteo, se puede ver a la intérprete de «Corazón de cartón» con un look total pink, aunque lo que no les gustó a sus haters fueron los moños que tenía en el pelo.

La catalogaron como una mujer que se quiere hacer la nena por su peinado y por estar disfrutando junto a su madre y una irresponsable por no pasar Año Nuevo junto a sus hijos.

Florencia Freijo defendió a la China Suárez

No obstante, la escritora Florencia Freijo fue una de las tantas mujeres que salió a defender a la China Suárez de todas estas agresiones.

«Un varón pendeviejo, se tatúa, se tiñe el pelo de gris, jamás sale con mujeres de más de 30 años: ídolo, capo máximo, le chupan las medias en todos lados», comenzó el descargo de la autora de «Maleducadas».

«Una mujer se pone dos moños en la cabeza y es una «pendevieja». ¿Saben qué les molesta a ustedes? Les molesta que ella tenga la libertad que ustedes no se animan a sentir en sus propias vidas», continuó la politóloga.

«Mujeres que actúan como rectoras de la vida de las otras, así dispersan sus inseguridades e infelicidad, en un intento estéril de que todas las demás las observemos y tengamos sus mismos complejos, sus mismas inseguridades», aseguró Freijo.

«Así fuimos educadas, así las infelices que comentan acá educan a las que miran: nos enseñan que si no nos «comportamos como se debe» vamos a perder credibilidad, reputación, y hasta van a animar a cuestionarnos ¡Como madres!», detalló la escritora.

«Si miraran con lupa a los varones como miran a las demás, el mundo sería otro. Pero además me da terror los niveles de exigencia», subrayó la politóloga.

«En el fondo, les jode que una mujer con tres hijos no quiera ser ejemplo de nada. Todo el tiempo búscanos que haya «mujeres ejemplares y buenas» porque eso significa que «no joden a nadie». Para ustedes es una amenaza que una mujer con tres hijos pueda ser buena madre, disfrutar de su erotismo, disfrutar de sus parejas, disfrutar de sus viajes y su dinero«, expresó Freijo.

«Es el espejo en donde no se atreven ustedes a mirar sus propios deseos. Los tienen tan reprimidos que es mejor criticar, que enfrentarse a la durísima verdad de ver en ese reflejo lo resentidas que están. Ojalá este 2024 se animen a tener una vida tan plena, tan enfocada, tan ocupada, que cuando vean a otra mujer feliz sientan que estamos en un mejor camino para todas, en un mundo que históricamente nos quiere apagadas y competitivas con las otras«, finalizó la escritora.