En un movimiento que celebra la diversidad y la riqueza de la tierra argentina, artesanos de todo el país están dejando su huella en el mundo del diseño de interiores al utilizar materias primas locales para crear piezas auténticas y sorprendentes.
Se destacan desde la calidez de la madera hasta la versatilidad de la cerámica, ya que estos creadores están reinventando el diseño, demostrando que la autenticidad y la calidad pueden encontrarse en lo que la misma tierra ofrece.
Los materiales argentinos necesitaban una vuelta de tuerca
La madera, proveniente de los bosques de la Pampa y la Mesopotamia, se erige como la protagonista indiscutible en esta nueva ola de diseño. Los artesanos talentosos han perfeccionado la habilidad de trabajar con maderas autóctonas, como el quebracho y el algarrobo para crear mobiliario que no solo sea estéticamente impactante, sino también resistente y duradero.
La cerámica, extraída de las entrañas de la tierra en Salta y San Juan, se ha convertido en otra joya para los diseñadores de interiores. Se puede realizar desde azulejos hasta vajillas, destacando a la cerámica artesanal argentina por sus colores vivos y diseños inspirados en la naturaleza.
Este renacimiento del diseño de interiores con materias primas locales no solo resalta la belleza de los recursos argentinos, sino que también impulsa la economía artesanal del país. Es más que una tendencia; es un movimiento que celebra la identidad argentina en cada detalle.
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