play_arrow

keyboard_arrow_right

Listeners:

Top listeners:

skip_previous skip_next
00:00 00:00
playlist_play chevron_left
volume_up
  • cover play_arrow

    CORRIENTES FM SOMOS TU VOS

  • cover play_arrow

    HUMOR PARA LEER Y ESCUCHAR Reflexiones de la vida diaria: «Metidas de pata» E-GRUPOCLAN

Deportes

“No me para ni la muerte”: el brutal accidente que dejó a Roña Castro 23 días en coma y del que nada recuerda

today18 de agosto de 2024 1

Fondo
share close

Jorge “Roña” Castro, que este domingo cumple 57 años, supo tener una extensa trayectoria como boxeador, pero sufrió un final abrupto: un gravísimo accidente automovilístico que protagonizó en 2005, en la zona porteña de Puerto Madero, lo dejó 23 días en coma.

El excampeón mundial de peso mediano de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) peleó más duro que nunca, en aquel caso contra la muerte, y ganó. Se recuperó y volvió a subirse a un ring, aunque por las secuelas del choque su carrera como boxeador se terminó pronto: dos años después, en 2007, abandonó el boxeo profesional.

Aquel accidente que le provocó múltiples traumatismos se produjo en el cruce de las calles Azucena Villaflor y España, en la Costanera Sur de Puerto Madero. El Roña perdió el control del Renault Laguna color bordó que manejaba y se estrelló contra un árbol a alta velocidad.

Los bomberos tuvieron que cortar los hierros del auto para poder sacarlo y trasladarlo al Hospital Argerich, en donde estuvo en coma por 23 días. Fue grave aunque pudo haber sido trágico. El saldo para Roña fue un traumatismo de tórax, que le produjo una hemorragia entre el pulmón y la pleura, el tejido que lo recubre. Esa herida le impedía respirar normalmente.

Además, tuvo un fuerte golpe en el cráneo y también en la rodilla. Pero el impacto de los daños no fue tan severo y Castro logró sobrevivir y hasta regresó al ring, aunque yo no era lo mismo que antes. Sin embargo, salió adelante, como en su más histórica pelea, en diciembre de 1994, cuando defendía su corona de campeón mediano y parecía que estaba nocaut contra John Jackson en el último round, pero sacó una mano con la que derribó y venció a su rival.

El propio santacruceño dijo en el momento de su larga rehabilitación que nada le quedó registrado del incidente vial. “No me acuerdo de nada: ni cuatro días antes, ni una semana después… Cuando me desperté, le dije a mi mujer: ‘Yo no soy un drogadicto… ¿por qué me internaste?’ Por la ventana veía la cancha de Boca y pensaba que estaba en Paraná, porque la confundía con otro estadio”, le contó a la Revista Gente.

Y con su habitual hilaridad, sostuvo: “Según lo que dijeron los doctores, fue un golpe muy duro. En el ring demostré que nadie quiere pelearme, pero con este accidente queda claro que ni la muerte me puede parar…”.

Los 57 años del Roña Castro: una vida de lucha

Nació en Caleta Olivia, provincia de Santa Cruz, el 18 de agosto de 1967. Vivió un tiempo con su padre en el norte del país, hasta que se mudó con su madre a su provincia natal. A los 20 años debutó como boxeador profesional en Buenos Aires, en una pelea contra César González, y ganó por nocaut.

Desde entonces, el Roña no dejó de acumular títulos. En sus dos décadas de carrera se consagró campeón argentino de peso mediano en 1990 y dos veces campeón latino por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB), una en 1999 y otra en 2001. Sin embargo su gloria como campeón fue en 1994, cuando consiguió el título más importante en su carrera: campeón mundial mediano de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), tras vencer a Reggie Johnson.

El Roña Castro en una noche inolvidable, cuando retuvo su corona en una pelea milagrosa contra John Jackson. FOTO: Reuters.
El Roña Castro en una noche inolvidable, cuando retuvo su corona en una pelea milagrosa contra John Jackson. FOTO: Reuters.

Su carrera fue extensa, con un récord de 144 peleas (130 ganadas, 90 de ellas por nocaut) hasta 2007, año en el que se retiró. Un tiempo más tarde, en 2020, Castro levantó su propio gimnasio en la localidad bonaerense de Temperley. Sin embargo, con todo listo para abrir sus puertas, la cuarentena por la pandemia del coronavirus pausó sus planes.

El gimnasio llamado “Locomotora Castro” (Locomotora, su otro apodo, el que le puso la prensa por su forma de boxear) se reinventó y, en ese mismo año, decidió usar su emprendimiento como comedor para ayudar a sus vecinos en plena crisis sanitaria y económica.

Desde entonces, el campeón mundial reparte comida, pero también recibe a toda aquella persona que quiera practicar el deporte de forma recreativa, sin distinción de género o de edad. También expresó en más de una ocasión su deseo de ser concejal en Lomas de Zamora “para ayudar a la gente”. No sería la primera vez: Roña se desempeñó como tal en Caleta Olivia, su ciudad natal.

Escrito por E-GRUPOCLAN

Valóralo