Una denuncia por violencia de género en una casa de la localidad puntana de Villa Mercedes derivó en un importante e inesperado avance en la causa que investiga el femicidio de Pamela Cuello, una mujer que estaba desaparecida en Mendoza. Su cuerpo apareció a fines de agosto, desmembrado y quemado, en un baldío.
Según publicó El Chorrillero, la policía detuvo a Eduardo Casanova el 17 de septiembre pasado acusado de agredir a su mujer en un domicilio de la calle Las Heras, donde la pareja y sus tres hijos se habían mudado unos siete u ocho días antes del incidente.
La Justicia de San Luis lo imputó por el delito de “lesiones leves doblemente calificadas por el vínculo y por mediar violencia de género” y estuvo a punto de recuperar la libertad, pero justo cuando se vencía la prórroga de la detención se conoció que Casanova tenía pedido de captura por “homicidio calificado” en la provincia de Mendoza.
“Va a quedar sometido a las medidas cautelares que eventualmente puedan tomar los órganos jurisdiccionales de esa provincia”, confirmó al mismo medio el fiscal de Instrucción N° 4 Leandro Estrada. Durante la misma audiencia estuvieron presentes los policías de Homicidios mendocinos, que después concretaron el traslado del detenido.
El femicidio de Pamela Elizabeth Cuello
Pamela, de 38 años, desapareció el último 10 de agosto y el 19 su familia hizo la denuncia por averiguación de paradero. Días después, la encontraron asesinada en un terreno baldío ubicado en las calles Zapata y Barrionuevo, en Las Heras.
La escena era macabra. Los investigadores encontraron en ese lugar un torso quemado, una mano y una pierna. Justamente, un par de anillos que tenía puestos sirvieron para identificar a la víctima.
De acuerdo a la investigación, antes de matarla el asesino le quitó la ropa y la desparramó en el campo, y después prendió fuego sus restos utilizando la cubierta de un vehículo. La autopsia no logró establecer la causa de la muerte, aunque sí se confirmó que el cuerpo no presentaba heridas de arma de fuego.